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Racine, Jean
(La Ferté-Milon 1639-París 1699) Escritor francés. El autor que llevó
la tragedia clásica a la cumbre de su perfección nació en un hogar
austeramente jansenista, un año después de Luis XIV, con quien
habría de encontrarse en más de una oportunidad. La educación
familiar y la académica, en un colegio religioso, determinaron en
Racine una definida concepción del hombre marcada por el
pesimismo, así como una profunda cultura helénica. Joven aún, se
emancipó del ambiente jansenista, pero no de su cosmovisión, y se
entregó a la literatura, en especial al teatro.
En 1664 publicó su primera obra, «La Tebaida», que acusa la
influencia de Corneille, y en 1667 inauguró su carrera de dramaturgo
con «Andrómaca». En los diez años siguientes escribió e hizo
representar sucesivamente sus obras maestras, que le valieron una
resonante popularidad: «Británico» (1669), «Berenice» (1670),
«Bayaceto» (1672), «Mitrídates» (1673), «Ifigenia» (1674) y
«Fedra» (1677), así como también su última comedia, «Los
litigantes» (1668). Amargado por sus enemistades, que en muchos
casos él mismo provocó por su carácter irritable, resolvió retirarse
del teatro. Más tarde, Luis XIV lo llamó a la corte para que actuara
como lector, y Colbert lo nombró, conjuntamente con Nicolas
Boileau, historiador del Rey. Tras acceder al deseo de Madame de
Maintenon para que escribiera una obra teatral apta para ser
representada por las alumnas del Colegio de Saint-Cyr («Esther»,
1689, de cuyos ensayos se encargó personalmente), Racine cerró su
carrera de dramaturgo con la pieza «Atalía» (1691), entristecido por
haber perdido los favores reales a causa de su fidelidad a los
maestros jansenistas, en un momento en que se gestionaba la
supresión de ese grupo de religiosos.