ma vía de entrada seguramente aún es mayor. Es frecuente oír que
tal o cual producto "huele muy mal" o "el olor que tiene me marea",
sin saber que cuando se percibe el olor de una sustancia es porque
ha llegado a la nariz y, posiblemente, se está absorbiendo ya.
Para determinados productos, las vías de entrada son a
veces también vías de eliminación de parte de ellos y/o de sus sus-
tancias de desecho, dando lugar a cierta confusión en algunos tra-
bajadores, como cuando días después de haber trabajado con un
producto, y con una higiene personal adecuada, se mantiene el olor,
no porque el lavado y cambio de ropa hayan sido insuficientes, sino
por la eliminación del producto o sus derivados a través del sudor.
2. Posibles daños para la salud derivados de los plaguicidas.
Como se sabe, la exposición a los plaguicidas supone siem-
pre un riesgo para la salud, por la posibilidad de que produzcan efec-
tos o acciones perjudiciales, es decir, daño a las personas. Para cla-
sificar estos efectos podrían dividirse de muchas formas, pero
parece más interesante utilizar el tiempo de aparición del problema
como criterio, siguiendo el siguiente esquema:
2.1. Efectos agudos o daños que pueden producir a corto
plazo, poco tiempo después de haber estado en contacto con
el o los productos:
· Lesiones en las "puertas de entrada".
· Intoxicaciones agudas.
· Reacciones alérgicas agudas.
2.2. Efectos subagudos o daños que pueden producir a
medio plazo.
· Intoxicaciones subagudas.
· Efectos neurotóxicos retardados, como los que producen algunos
organofosforados
2.3. Efectos crónicos o daños que pueden producir a largo
plazo (años).
· Intoxicaciones crónicas.
· Reacciones alérgicas crónicas.
· Cánceres y otros.