go supone, ya que puede, por ejemplo, utilizarse de la forma más
adecuada, durante poco tiempo o a muy baja concentración y enton-
ces, en ese caso, el riesgo será menor.
Este riesgo de sufrir daño para la salud depende sobre todo de
la toxicidad del producto y de lo expuesto que se esté a él, además de
otras variables, entre las que tal vez el lugar más importante lo ocupe el
conocimiento que se tenga de que ese riesgo existe y de cómo puede
evitarse. Si no se ha evitado, y el contacto con el plaguicida se ha pro-
ducido, tendrá repercusiones en la persona, aunque en la mayoría de
los casos no se perciba daño para la salud. El daño será mayor o menor
dependiendo de lo tóxico que sea el producto y de la dosis que se haya
absorbido, o sea, la cantidad que ha entrado en el organismo en un
determinado período de tiempo. Además, hay que tener en cuenta las
variaciones debidas a las características personales, la vía por la que ha
entrado, la capacidad para eliminarlo, la rapidez con que se haga el
diagnóstico, el tratamiento médico correcto, etc.
En esquema:
➔ Persona ➔ Exposición ➔ Riesgo ➔ Daño
Plaguicida (Toxicidad)
La acción tóxica fundamental suele ser consecuencia del me-
canismo de acción de la sustancia activa del plaguicida que, en prin-
cipio, es similar para las sustancias que pertenecen al mismo grupo
químico y diferente entre sustancias de grupos químicos distintos. Así
los organofosforados (dimetoato, metil-azinfos...) y los carbamatos
(carbaril, aldicarb...) actúan paralizando unas sustancias contenidas
en la sangre y en el sistema nervioso llamadas colinesterasas, impi-
diendo su función y llegando de esta forma a la intoxicación. Los pi-
retroides, en cambio, actúan estimulando algunos sistemas orgáni-
cos y los raticidas de efecto anticoagulante, impidiendo la coagula-
ción de la sangre cuando se produce una herida.
Como los plaguicidas, además de la sustancia activa suelen
llevar otras sustancias (ingredientes inertes, adyuvantes, aditivos)
generalmente para favorecer su eficacia, estabilidad...; también ellas
pueden ocasionar problemas de salud.
Otra consideración importante, común a todos los productos
químicos, es que el riesgo para la salud al haber tenido contacto con
un plaguicida puede continuar después de la exposición y los pro-
blemas pueden aparecer más tarde.
Según la Reglamentación Técnico-Sanitaria (RD 3.349/1983,
y las posteriores modificaciones), y la normativa de preparados peli-