· Riesgo para la salud del aplicador y del consumidor.
· Daño ecológico (contaminación del medio ambiente, problemas de
resistencias, aparición de nuevas plagas, etc.).
· Coste económico.
A esa situación general reseñada hay que añadir que en la
Comunidad Valenciana el tema de los plaguicidas tiene una especial
relevancia por diversos motivos como:
· La gran importancia del sector agrícola.
· El elevado consumo de plaguicidas.
· Una producción agrícola dirigida mayoritariamente al consumo huma-
no y en crudo.
· La escasa información de los trabajadores que utilizan estos produc-
tos, origen de muchas prácticas incorrectas.
· La dificultad para una adecuada protección personal por parte de los
aplicadores, debido fundamentalmente al clima propio de la zona me-
diterránea.
Con el transcurso del tiempo el concepto de plaga, y los mé-
todos para combatirlas han variado mucho, por razones sociales,
económicas y desde luego, técnicas. En ese proceso evolutivo hay
fechas que son muy significativas en la lucha contra las plagas, casi
siempre coincidentes con la publicación de alguna disposición legis-
lativa de notoria influencia. Así, cabe destacar, en España, las si-
guientes etapas:
1ª Etapa: histórica o de las plagas bíblicas
Periodo: hasta la publicación de la Ley de Plagas del Campo
de 21 de mayo de 1908.
En principio se entendía por plaga cualquier invasión de ori-
gen animal con efectos verdaderamente devastadores. La plaga sím-
bolo es la langosta, conocida desde la antigüedad. En España se co-
nocen disposiciones para combatirla a partir del reinado de Felipe II,
que promulgó la ley titulada "Obligación de las Justicias Ordinarias a
hacer matar la langosta a costa de sus concejos" (1593).
Durante el reinado de Felipe V se publica la Instrucción titula-
da "Reglas para la extinción de la langosta en sus tres estados; y
modo de repartir los gastos que se hicieren en este trabajo" (1755), y
ya en el período de la Restauración la "Ley de extinción de la langos-
ta" de 10 de enero de 1879.