signos ortográficos. Son todas aquellas marcas gráficas que, no siendo números ni letras, aparecen en los textos escritos con el fin de contribuir a su correcta lectura e interpretación. Cada uno de ellos tiene una función propia y unos usos establecidos por convención. Los signos ortográficos se dividen en signos de puntuación y signos auxiliares.
1. Signos de puntuación.
Entre sus funciones están la de marcar las pausas y la entonación con que deben
leerse los enunciados, organizar el discurso y sus diferentes elementos para
facilitar su comprensión, evitar posibles ambigüedades en textos que, sin su
empleo, podrían tener interpretaciones diferentes y señalar el carácter
especial de determinados fragmentos de texto —citas, incisos, intervenciones de
distintos interlocutores en un diálogo, etc.—. Los signos de puntuación en
español son los siguientes: el punto, la coma, el punto y coma, los dos puntos,
los puntos suspensivos, los signos de interrogación y exclamación, los
paréntesis, los corchetes, la raya y las comillas (® punto; coma; punto y coma; dos puntos; puntos suspensivos;
interrogación y exclamación (signos de); paréntesis; corchete; raya; comillas).
2. Signos auxiliares.
Sus funciones son muy variadas y se explican en las entradas correspondientes a
cada uno de estos signos, que son la tilde, la diéresis o crema, el guion, la
barra, el apóstrofo, el párrafo, el asterisco y la llave (® tilde2; diéresis; guion2 o guión; barra;
apóstrofo; párrafo; asterisco; llave).