Ío. Nombre de la joven que, según la mitología, fue seducida por Zeus y convertida después por este en una ternera blanca para protegerla de los celos de Hera; hoy es también el nombre de uno de los satélites de Júpiter. Aunque en griego la vocal tónica era la o, la pronunciación corriente en español hace tónica la i; por tanto, debe escribirse Ío, con tilde, para señalar el hiato entre las dos vocales.