"Anoxia" se refiere a la falta total de oxígeno, aunque generalmente se usa el término de "hipoxia".

- Hipoxemia: es del déficit de oxígeno transportado en sangre. Puede deberse a diferentes factores: por baja concentración de oxígeno en la atmósfera (ejemplo: por la presencia de un gas asfixiante que compite con el oxígeno), por lesiones pulmonares o bronquiales (ejemplo: por una intoxicación o por un accidente traumático que impide los movimientos de la respiración, por una irritación química pulmonar, por fibrosis, etc.) o bien por una lesión de la sangre que transporta poco oxígeno, como ocurre en una anemia (ejemplo: la formación de carboxihemoglobina), como es el caso de intoxicación por monóxido de carbono o de metahemoglobina en el caso de anilinas...

- Otras veces la hipoxia puede deberse a problemas circulatorios (hipocinética) (ejemplo: enfermedades cardiacas, actividad física intensa, trabajo en ambiente caluroso...)

- Otra variedad de la hipoxia es la llamada "hipotóxica", porque las células no pueden consumir el oxígeno, como ocurre con intoxicaciones como la de cianuro y sulfuro.

- Una mención aparte son la hipoxias debidas al ascenso aeronáutico a grandes alturas por modificaciones de las presiones de oxígeno.

- Los síntomas son: alteraciones del ritmo cardiaco y respiratorio, fatiga, efectos psicológicos y sensoriales con fallos en las actividades.

Si es de forma aguda (accidentes, por exposición intensa a tóxicos o gases,...) cursa con pérdida de conocimiento.

En los casos crónicos (por exposiciones menores pero repetidas) existe un deterioro de las facultades físicas y psíquicas en general, con fatiga y disminución de la capacidad de trabajo (a pesar de las fases de "adaptación" del organismo).